Hay lugares donde llegamos a formar parte de una familia. Hay espacios que nos hacen sentir como en casa y hay personas que nos traen momentos tan felices que queremos recordar por siempre. Así como experimentamos momentos que parecen durar para toda la vida, ocurren cambios inesperados que muchas veces sentimos como pérdidas. En La Isla de Los Abrazadores nos gusta pensar que quienes dejan de estar físicamente, son seres que nos acompañan siempre escondiéndose en el corazón.
Probablemente has escuchado que el duelo es un proceso que todos atravesamos cuando tenemos alguna pérdida de un ser querido. Esta idea fue analizada particularmente por la psiquiatra Elisabeth Kübler-Ross, quien en 1969 publicó su libro llamado On death and dying (Sobre la muerte y el morir). Menciona que el duelo tiene cinco etapas: negación, ira, negociación, depresión y aceptación. Aunque, según el libro, estas etapas están planteadas para que ocurran en nosotros de manera secuencial, sabemos que las emociones no las sentimos de una manera tan rígida. Así que es natural que experimentes cada uno de esos estados en intervalos de tiempo muy amplios o muy cortos y puede ser que ocurran en un orden diferente.
Quienes se esconden: seres que nos acompañan
Vivir el proceso del duelo atravesando las cinco etapas, no quiere decir estrictamente que has superado la pérdida y que estás preparado para atravesar este proceso nuevamente. Nora McInerny, autora del libro No Happy Endings (No hay finales felices). dice que no se trata de superar el duelo de un ser querido, sino de asumir la certeza de que no esté como lo hacía antes. Creemos que así es, que asumir la muerte como parte de la vida es seguir viviendo con la certidumbre de que esta persona no está más físicamente, pero aun así podemos seguirla amando.
Nos gusta pensar que los seres que ya no podemos ver los tenemos escondidos en el corazón. Ese es el superpoder del Abrazador Bonga. Un ser que tiene la piel color escondite y le permite camuflarse entre las ramas del bosque. Lo mismo que hacen los seres que sentimos cerca porque se camuflan en nuestros recuerdos y experiencias. Con Bonga aprendemos que la alegría de haber compartido momentos mágicos con ciertas personas no se pierde cuando dejamos de verlas. Esta manera de sentir a las personas que ya no están con nosotros ayuda a que la esperanza se vuelva sana. Sabemos que hay cosas que son irremediables, tanto el dolor como la alegría de haber compartido la vida con personas que no vamos a dejar de amar nunca.
Hemos creado una manera de acompañar a quienes amas a transitar este proceso: se trata del Kit de Duelo. Las herramientas principales son El libro del Abrazador y su protagonista convertido en un muñeco que te hará sentir el poder del abrazo. Conócelo aquí: https://huggerisland.org/product/abrazador-regalo-de-condolencias/